17 MARZO
A menudo en el pasado
teníamos muchas experiencias devastadoras que habíamos jurado no repetir “nunca
más”. Éramos completamente sinceros en esos momentos de desesperación. Pero, a
pesar de nuestras intenciones, el resultado era inevitablemente el mismo.
Finalmente la memoria de nuestro sufrimiento se marchitaba, al igual que la
memoria de nuestra “promesa”. Así que lo hacíamos nuevamente, terminando aún
peor que cuando prometimos no volver a hacerlo. Para siempre se convirtió en
una semana, un día, o menos. Aprendimos que sólo necesitamos preocuparnos del
día de hoy, ese lapso específico de 24 horas.
“Que los requisitos a
largo plazo de frases como “nunca más”, “jamás”, “para siempre” no debilite mi
determinación. “Para siempre” cuando esté dividida en días individuales – no
parece ser mucho tiempo. Que pueda despertar cada día con mi objetivo trazado
para 24 horas”.
Buen día
No hay comentarios:
Publicar un comentario