lunes, 28 de noviembre de 2016

28 NOVIEMBRE

28 NOVIEMBRE
Ya no soy tan envidioso, ni tengo tantos celos de las propiedades y talento de otras personas. Antes estaba siempre secretamente celoso y envidioso de la gente que tenía el amor y el respeto de su familia, que vivía una vida normal y era aceptada por sus semejantes. Yo me hacía creer a mí mismo que era tan bueno como ellos; pero sabía que no era así. Ahora ya no tengo por qué sentir envidia. Trato de no desear lo que no merezco. Estoy satisfecho con lo que he ganado con mis esfuerzos por vivir rectamente, o por lo menos, estoy tratando de superar esa condición.- “¿Me he desembarazado del veneno de la envidia?”
“Ansiamos en alcanzar una paz, un descanso, una satisfacción que nunca hemos encontrado en el mundo o en sus empeños. Algunos no están conscientes de sus necesidades, y cierran la puerta a los regalos de la vida.”
Buen día

No hay comentarios:

Publicar un comentario