18 NOVIEMBRE
“No temas los errores;
no existen.” Miles Davis
La vida es como una
pieza de jazz. A veces es estridente, a veces es triste, pero siempre llena de
cambios y giros inesperados, con un nuevo tema encantador por aquí y por allá.
Desde el punto de vista clásico conservador, podríamos vernos inducidos a calificar
como un error ese tema o armonización nueva, pero en el mundo del libre flujo
del jazz, simplemente se vuelve otra variación del todo melódico.
Así que aceptaste el
trabajo equivocado, escogiste una carrera basándote en lo que otros esperaban
de ti y no en lo que tú esperabas de ti. ¿Fue un error? Sólo si perdiste todo
tu tiempo pasado ahí reiterando el hecho de que hubieras preferido estar en
otro sitio y pasaste por alto la oportunidad de aprender algo sobre ti mismo.
Admite tus errores. Di
lo siento cuando te equivoques.
Pero no te sientas amenazado
por tus errores del pasado, ni te paralices ante la posibilidad de cometer
errores en el futuro. Es obvio que seguirás metiendo la pata. Pero, también es
muy posible que puedas inventar una o dos temas nuevos en el camino.
“Hoy aprenderé de mis
errores y los transformaré en éxitos.”
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