16 DE SEPTIEMBRE
Ante los problemas
aparentemente más imposibles, puede ser fácil creer que nuestros pensamientos
negativos reflejan la verdad. Se nos presentan de forma muy convincente
haciéndonos creer lo peor, y hasta parece superficial considerar una solución
positiva. No obstante la voz más alta no es necesariamente la que está en
posesión de la verdad.
No importa cuán
insistente sea un sentimiento, es sólo un sentimiento, no una profecía. No
sabemos hoy lo que pueda pasar mañana. Pensar en una posible solución nos puede
llevar a la desilusión, pero a veces nos ayuda a recordar que una solución
positiva es tan probable como una negativa.
Somos incapaces ante
el resultado de nuestras acciones. Podemos tratar de tomar hoy una decisión sabia pero lo que suceda en el futuro no está
en nuestras manos. Ya que no sabemos qué esperar, ¿por qué no confiar en que la
vida pueda utilizar todo lo que nos suceda para acelerar nuestro crecimiento?
“Está oportunidad, como
todas, es muy buena si sabemos qué cosa hacer con ella”.
Buen día
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