23 JUNIO
La actitud para
aceptar todas las consecuencias de mis acciones pasadas, y la responsabilidad
por el bienestar de los demás al mismo tiempo debe ser mi esencia. Una disculpa
informal rara vez será suficiente para reparar un ofensa, por el contrario, un
cambio verdadero de actitud puede hacer maravillas contra las crueldades
pasadas. Si he privado a alguien de una cosa material, reconoceré la deuda y la
pagaré lo antes que pueda. “Me tragaré mi orgullo y daré el primer paso hacia
la reconciliación”.
“Hoy mostraré las
mejores maneras de hacer “reparaciones directas”. Algunas veces admitir mis
errores puede ser suficiente para algunas personas y para descargar mi culpa
latente. Otras veces, la rectificación debe pensarse creativamente. Que sea
totalmente consciente de que no puedo dar este paso a menos que tenga una
preocupación sincera de cómo se sienten los demás, junto con cambios en mi
conducta.”
Buen día
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